Vía facebook (al final va a tener razón algunos que dicen que tuenti es de niñatos con fotos en los espejos de los cuartos de baño, y facebook es bastante más interesante) me ha llegado un artículo de El Mundo sobre los tópicos que se manejan en la prensa europea frente a la islámica.

Y ayer cenando, con toda la resaca de los excesos de fin de año, uno de los telediarios hacía un reportaje de como se hacía la cuenta atrás para la entrada del nuevo año en diferentes puntos del planeta.

Frente a ese contraste de celebraciones por todo lo alto, abrazos de los Clinton más que preparados e intencionados, le seguía una noticia que decía que algunos de los países Árabes habían suspendido las celebraciones previstas como señal de soliraridad con los palestinos de Gaza, poniendo en evidencia lo diferentes que son las cosas según el punto del planeta en que te encuentres, perogrullada para casi todos, espero.

El caso es que parece mentira que en los tiempos de hiper comunicación que vivimos, se nos tome el pelo de semejante forma, y estemos más que acostumbrados a las películas de indios y vaqueros, donde siempre hay un malo y un bueno, donde los tonos grises no existen, y el malo de la película y el culpable están meridianamente claros.

Tan acostumbrados que en muchos hogares católicos se representa un nacimiento en la ciudad de Belén, sin detenerse a pensar lo que está sucediendo por allí... para ser coherentes, al lado del caganer deberíamos de poner alguna figurita armada...

El caso es que no está demás leer lo que tiene que decir alguien que fue corresponsal para Israel y los territorios palestinos entre 2005 y 2007.


En fin, comienza el año y nosotros a nuestra crisis. No os asustéis, pero como deseo para el año voy a citar al Papa Benedicto XVI, que hace algunos meses en la homilía de una misa en Lourdes, en la que manifestó que "Él nos hará libres para amar como Él nos ama y para construir un mundo reconciliado". Brindo por eso, para que la propia iglesia y los gobiernos dejen que los hombres se amen en libertad.